La amistad no se presume, se honra, advirtió el gobernador Alejandro Armenta a los integrantes del Poder Judicial estatal, al señalar que ningún juez puede hablar en su nombre o representación, ya que eso “se llama tráfico de influencias y es un delito”.
Este señalamiento tiene relación con el magistrado Fredy Erazo, exasesor de Armenta Mier cuando fue senador de la República, quien ha sido acusado por personal del Tribunal Superior de Justicia del Estado por presumir su cercanía con el gobernador poblano.
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En este contexto, el gobernador aclaró que nadie puede “a mi nombre quererse atribuir, o relación, influencia o derecho de representación en el TSJEP, nadie; las amistades, los compadrazgos, las familiaridades, se honran, no se presumen”, puntualizó.
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Por ello, advirtió que quien intente influir en los órganos del Tribunal estatal comete un delito de tráfico de influencias.
Reiteró que hay “algunos que han llegado que sienten que la amistad es un pasaporte a la impunidad o al influyentísimo”.
Editora: Socorro Juárez
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