El obispo auxiliar de Puebla, Tomás López Durán, pidió durante la misa de este domingo en la Catedral de Puebla por el descanso eterno de las víctimas de violencia, así como por los padres y madres buscadores que luchan por encontrar a sus seres queridos. En su intervención, hizo especial énfasis en los recientes hechos violentos en Amozoc, Guadalajara y Guanajuato, lugares donde se han registrado sucesos relacionados con el crimen organizado.
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Durante su homilía, López Durán recordó a varias víctimas, incluyendo a José Miguel Flores Lara, quien murió en Amozoc, Teresa González Murillo, madre buscadora asesinada en Guadalajara, y Heriberto Navarrete López, joven de la Pastoral Juvenil de Irapuato, quien fue asesinado en Pénjamo, Guanajuato. Asimismo, el obispo hizo un llamado a la oración por las necesidades de los colectivos de madres y padres buscadores, quienes continúan en la búsqueda incansable de sus hijos desaparecidos.
“Acuérdate también de nuestros hermanos que se durmieron en la esperanza de la resurrección. De José Miguel Flores Lara, que murió víctima de violencia en Amozoc, Teresa González Murillo, madre buscadora asesinada en Guadalajara, Heriberto Navarrete López, joven de la Pastoral Juvenil Irapuato, asesinado en Pénjamo, Guanajuato (…) especialmente de las intenciones y necesidades de los colectivos de padres y madres buscadores”, expresó el obispo.
Este mensaje se enmarca dentro del contexto de la Cuaresma, período que precede a la Semana Santa, en el que se la Iglesia en México invita a la reflexión y a la oración por aquellos que sufren a causa de la violencia y la desaparición forzada.
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