La jornada de movilización por el Día Internacional de la Mujer terminó en actos de violencia que afectaron las instalaciones de la Fiscalía Especializada en Delitos de Género en Puebla. Un grupo de manifestantes, identificadas como parte del Bloque Negro, prendió fuego en la entrada del edificio, causando daños significativos en tres oficinas donde se resguardaban expedientes de investigación sobre casos de violencia contra mujeres.
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De acuerdo con la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE), los hechos ocurrieron durante la tarde, cuando un grupo de mujeres encapuchadas irrumpió en la sede ubicada en la 10 Oriente del centro histórico. Además del incendio que consumió documentos de investigaciones en curso, se registraron destrozos en puertas, ventanas y mobiliario de las oficinas afectadas.
En un comunicado, la FGE lamentó los hechos y expresó su preocupación por la pérdida de información clave para los procesos judiciales en favor de las víctimas.
“Respetamos el derecho a la libre expresión y la protesta social, pero condenamos los actos que afectan el trabajo en defensa de las mujeres violentadas”, señaló la institución, al tiempo que hizo un llamado a realizar manifestaciones pacíficas.
Los incidentes no se limitaron a la Fiscalía. Integrantes del Bloque Negro también causaron destrozos en paraderos del sistema RUTA sobre el bulevar 5 de Mayo, así como en las canchas deportivas del Centro Escolar Niños Héroes de Chapultepec. Posteriormente, llegaron al zócalo de la ciudad, donde rompieron cristales de las galerías del Palacio Municipal, afectando la oficina de atención al turismo, el Museo del Palacio Municipal y el Teatro de la Ciudad.
La protesta, que había comenzado de manera pacífica con la participación de miles de mujeres, culminó con el desalojo del zócalo y un saldo de daños en inmuebles públicos y comercios del centro histórico.
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Circuló la versión de que una joven de 21 años había sido detenida durante los disturbios, sin embargo, el gobierno estatal aclaró que la manifestante se separó del grupo voluntariamente y abordó un vehículo de un familiar, manteniéndose en comunicación con sus seres queridos para informar que se encontraba en buen estado.
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